Cada vez que un visitante se encuentra con un formulario en una página de contacto, éste se preguntará: ¿Vale la pena completarlo?

Tanto tu página de contacto, como cualquier formulario con el que cuentes en tu sitio para ofrecer una conversión, generará un momento clave en donde el usuario puede convertir o no. Generalmente, esto dependerá de los elementos que el visitante vea.

 

¿Página de contacto? ¿Conversión?

Así es, la página de contacto de un sitio se suele encontrar a través de un enlace muy visible desde el Inicio del mismo que generalmente dice algo como “Contáctenos” y puede servirle al usuario tanto para contactar a la empresa a través de un formulario, como para cualquier otro propósito, como los que detallamos a continuación:

• descarga de archivos
• contratación de servicios
• soporte y aclaración de dudas
• registros en el sitio de una empresa
• ventas y cotizaciones

Sea cual sea el propósito detrás del formulario, cuando el usuario decide proporcionar los datos que los campos le requieren, a esto se le denomina “conversión”. Por lo tanto, una conversión en las páginas de contacto no es más que un usuario enviando sus datos para obtener a cambio lo que le ofreces, cuando lo invitas a contactarte.

Sin embargo, prefiero pensar que la conversión verdadera en páginas de contacto no son los datos de un usuario. Una conversión genuina a través de un formulario se consigue cuando mediante el mismo ganas a un potencial cliente que está interesado en tu empresa y está dispuesto a brindarte su información a cambio de haber llamado su atención.

 

Formulario de http://www.jaradjohnson.com/ para contactos, donde incita a sus visitantes a mandarle un mensaje y a hacerse amigos.

 

El encuentro de un usuario con la página de contacto de una empresa es un momento muy decisivo; sin embargo, muchos negocios le prestan poca atención y terminan cometiendo errores que alejan al usuario no solo de contactarlos sino también de sus sitios web.

En este artículo realizaremos un viaje a través de los errores más comunes presentes en los formularios y páginas de contacto de sitios empresariales para ver cómo evitarlos y generar una experiencia satisfactoria para el usuario con cada registro.

 

 

Los formularios con demasiados campos, es decir, que requieren demasiada información por parte de los usuarios son un trampolín de salida para visitantes que llegan con curiosidad sobre tu negocio.

Cuando el usuario se siente interesado, es probable que si solo tiene que escribir su email, su nombre y su país, realice la conversión. Pero si aparte debe especificar teléfono de casa, móvil, trabajo, código postal, dirección, empresa y muchos otros campos, esto aumenta la tasa se rebotes de la conversión detrás del formulario.

 

Solución: Menos es más. Minimiza la fricción eliminando campos de poca relevancia hasta que ofrezcas un formulario corto de 2 a 5 campos. Algunos formularios exitosos han generado muchos más registros al solo pedir email.

Si es totalmente necesario para tu empresa solicitar mucha información  (por encima de la relevancia de la conversión), intenta separando el formulario en diferentes pasos, para que no parezca tan extenso y tedioso.

El ejemplo de abajo pertenece a Headlamp y muestra cómo un formulario con los campos estrictamente necesarios invita al usuario a realizar el contacto:

 

 

 

He visto formularios que no cuentan con títulos o descripciones sobre el propósito de los mismos. Solo aparecen los datos a completar y al final un botón que dice “enviar”. Ante esto uno no puede dejar de pensar,  ¿Y esto, para qué servirá realmente?

La página de contacto debe acompañar al usuario por el camino hasta la conversión por lo que necesita expresar con claridad por qué debería completar el formulario y qué pasará cuando lo haga.

Solución: Mantén informado al visitante sobre la razón y el beneficio directo de completar el formulario. La idea es resaltar la razón que estimula al usuario a completar la forma de contacto.

En este ejemplo de Re:fresa, expresan con eficiente claridad para qué sirve completar sus campos:

 

 

 

Cuando los usuarios comparten datos personales en internet, naturalmente sienten desconfianza y comienzan a recorrer con la mirada los elementos de la página preguntándose ¿es este sitio de confiar?

Si necesitan algo que les exprese seguridad y no encuentran nada, inevitablemente aquí se perderán conversiones.

 

Solución: Si para tu empresa y página de contacto se da el caso de que tus visitantes deban proporcionar información que puedan no querer compartir a la ligera, exprésales que tu formulario es una vía segura para sus datos:

• Ofreciendo sellos de confianza junto al formulario
• Incluyendo testimonios de personas que se beneficiaron por el mismo medio
• Resaltando los resultados y política de tu empresa
• Compartiendo un mensaje al finalizar el formulario que agradezca o mencione el paso a seguir
• Y principalmente: especificando que toda información que proporcionen es estrictamente confidencial

Cuando el usuario sienta que su información está en buenas manos al proporcionártela, estará un paso más cerca de la conversión genuina.

 

 

La verdad es que ese botón al final de los formularios que dice “Enviar”, en la mayoría de los casos no debería decir “Enviar”.

Muchas veces un usuario no completa un formulario porque no le estimula simplemente “enviar” su información. El llamado a la acción debe revelar el beneficio de contactar a la empresa con cierta firmeza y claridad. Debe atraer al usuario a completar todos los campos correctamente para finalmente poder darle click.

 

 

Solución: “Enviar el mensaje ahora”, “registrarse ya” y “descargar gratis la guía”, son ejemplos de llamados a la acción más estimulantes y descriptivos; combinados con botones coloridos y personalizados suelen ser un buen remate para un formulario que atrae conversiones.

No temas a los botones enormes y colores llamativos, estos captarán de forma eficaz la atención del usuario.

 

 

No ofrecer llamados a la acción estimulantes es terrible, pero incluir múltiples llamados y enlaces a diferentes cosas en la página de contactos también es sumamente negativo.

Cuando un visitante se encuentra con nuestro formulario, si queremos que lo complete, podemos siempre ofrecer señales que lo estimulen a seguir, pero nunca distracciones que lo alejen de esa conversión.

 

 

Este formulario de Hostalia.com es un ejemplo. Presenta su llamado a la acción como un botón rojo al final del formulario (el que se desea que presionen los usuarios en esta página). Sin embargo, presenta otro llamado a la acción al lado para una conversión diferente, mucho más llamativo (botón verde más grande, título resaltado y como si fuera poco, imagen con flechas de todas direcciones apuntándole).

 

Solución: El único llamado a la acción en la página de contacto, debe ser el de contacto. Es importante no desviar la atención del usuario cuando se pretende que complete un formulario, por lo que la página de contacto debe estar libre de distracciones; debe ser un ambiente que propicie el registro de datos.

 

 

Aquellos formularios que dejan al usuario abandonado a su suerte para ingresar información en todos los campos, están destinados a perder conversiones y lo que es peor: a dejar a más de uno muy frustrado.

En ocasiones se requieren ciertos caracteres, o puede que la información requiera contar con determinado formato; incluso, a veces son necesarios datos donde los usuarios necesitan asistencia para completarlos adecuadamente.

Para apoyar al usuario cuando complete los campos de tu formulario, debes acompañarlo en cada campo. ¿Cómo?

 

Soluciones:

• Incluye ejemplos descriptivos dentro de los campos que muestren el formato con el que hay que introducir los datos.
• Cuando el usuario ingrese datos no válidos en un campo, exprésalo a través de un mensaje entendible para un ser humano. Algo como “tal campo es obligatorio” o “el correo ingresado parece no ser válido” en lugar de “ERROR:00405”, lo cual dejaría muy confundido al visitante.

 

 

Los CAPTCHA son esas letras y números torcidos que a veces nos piden ingresar para probar que somos humanos y no robots completando información. Estos suelen evitar registros inválidos de formularios hechos por robots para enviar publicidad no solicitada o explotar los servicios ofrecidos.

El problema es que para los humanos es totalmente tedioso tener que ingresar un Captcha, ya que estos se generan automáticamente y muchas veces son difíciles de leer.

 

 

Solución: Usa Captchas legibles solo si piensas que tu formulario presenta signos de abuso de este tipo. De lo contrario, es recomendable evitar estos campos en las formas de contacto.

 

 

Esto suele ser un problema en muchas páginas de contacto. Tienen un formulario de 8 campos y lo posicionan en un pequeño cuadro apretado entre otras columnas con información y datos incluso ajenos a la conversión del mismo.

Es necesario dedicarle el espacio suficiente, es decir, la mayor parte de la página de contacto y considerar los pequeños detalles que transforman  la página en un entorno ameno y cómodo para que el usuario complete los campos.

 

Solución: Asígnale suficiente espacio al formulario para que sus elementos no luzcan apretados y puedan “respirar”.

También incluye señales que guíen al usuario por el camino que va desde el título de la página de contacto hacia el llamado a la acción, pasando por los campos que debe completar. Pueden ser flechas, figuras en una imagen de fondo o detalles minimalistas de colores cálidos que estimulen al usuario a fluir por el formulario hasta la conversión.

 

 

Aprovecha la oportunidad que te brinda un formulario de contacto sin cometer estos 8 graves errores, para ofrecer una experiencia satisfactoria para tu visitante, generando un entorno que lo invite con confianza a relacionarse con tu empresa y a llevarse algo a cambio.

Cuando la persona se sienta a gusto enviándote su información, habrás logrado la verdadera conversión y el beneficio será mutuo.