La investigación de palabras clave es importante para el marketing online. Pero aún más importante que eso son las palabras clave específicas que escoges para potenciar el posicionamiento online, a través de SEO y de avisos en Google.
Por supuesto, decidir qué palabras vamos a utilizar requiere una investigación, para la cual contamos con herramientas como la de Palabras Clave de Google, lo que facilita bastante este trabajo; sin embargo, luego de eso debemos ver qué hacer con todos los resultados y el listado de palabras clave recopilado.
Cómo determinar el valor de una palabra clave
Afortunadamente existen varios indicadores que nos pueden ayudar a determinar el valor de cada palabra clave.
El volumen de búsquedas:
¿Cuántas búsquedas por día o por mes se llevan a cabo para cada palabra o frase? Cuanto mayor sea el volumen, mayor será la oportunidad de dirigir el tráfico a tu sitio. Aunque también debes tratar de atraer sólo al público relevante ya que un término muy genérico puede generar tráfico de usuarios que no son potenciales clientes.
Por ejemplo, la palabra “abogado” puede ser buscada por alguien que:
- Quiere contratar un abogado.
- Quiere saber lo que hace un abogado
- Busca el Colegio de Abogados
- Quiere estudiar derecho
En cambio la palabra “abogado penalista Santiago centro” atraerá menos tráfico a tu sitio web, pero quienes lleguen a él estarán mucho más propensos a convertirse en clientes tuyos, ya que su búsqueda es más específica.
Buscar la competencia:
¿Cuántos sitios se muestran en Google al realizar una búsqueda utilizando una palabra clave?
Títulos de la competencia:
¿Cuántos sitios muestra Google que posean en su etiqueta de título la misma palabra clave por las que buscó el usuario?
Competencia directa:
Cómo clasifica la competencia por cualquier palabra clave en particular.
Cada uno de estos parámetros (el volumen de búsqueda y los datos de la competencia) proporciona información valiosa para saber lo que está sucediendo con las palabras clave, pero lamentablemente no puede decirnos los motivos por los que ocurre uno u otro comportamiento. Y a menos que sepas la razón, es imposible tomar una decisión para corregir el rumbo.
Esto es lo que las estadísticas no nos dicen:
El volumen de búsquedas:
¿Cuántas de estas búsquedas son realmente relevantes? ¿El usuario encontrará lo que quiere en tu sitio?
Buscar la competencia:
¿Están legítimamente clasificados los sitios de la competencia para estas palabras clave? ¿Están realmente optimizados estos sitios?
Posicionamiento de la competencia:
¿Los competidores pueden ser derrotados? ¿Cuántos de ellos podremos superar?
Competencia directa:
¿Sabes si tus competidores están obteniendo un posicionamiento por estas palabras clave?
La regla de tres
El problema de buscar en cualquiera de las señales y datos anteriores es que no te dicen nada sobre la intención del usuario que busca o si puedes convertir las palabras clave en ventas. Es bueno tener los datos, pero no sirven para tomar buenas decisiones si no aplicamos esta sencilla regla de tres:
Regla 1. ¿Es la palabra clave relevante para tu público objetivo?
Hay un montón de palabras clave que son aparentemente relevantes, pero cuando se mira más de cerca la intención del visitante, te encuentras con que está buscando algo completamente diferente.
Asegúrate de analizar las intenciones de los visitantes para cada una de tus palabras clave. Con Google Analytics puedes saber cómo se comportan las visitas en tu web segmentándolas por el criterio de búsqueda en Google.
Regla 2. ¿La palabra clave atraerá tráfico?
Esta pregunta no puede ser respondida hasta que respondas la pregunta anterior. No todo el tráfico es el mismo. No te obsesiones con lograr un alto volumen de búsqueda. Incluso las palabras clave de bajo volumen pueden entregar una cantidad fantástica de tráfico relevante cuando se combina con otras frases de long tail.
Te recomendamos leer Qué es una estrategia SEO de long tail.
Regla 3. ¿El tráfico enviado por la palabra clave se convertirá en clientes?
Cada palabra en la que inviertes una cantidad significativa de tiempo en la optimización de SEO o de avisos en Google debe ser capaz de convertir a tus visitantes en clientes. Dedica más tiempo a las palabras clave con las tasas de conversión más altas.
Conclusión:
La versión simplificada de esta regla de tres es: relevancia, tráfico y conversiones. Una buena palabra debería ser capaz de satisfacer estos tres puntos de forma satisfactoria. Si carece de alguna, entonces el valor de la palabra también se debilita.
Puedes seleccionar las palabras clave relevantes que dirijan tráfico, pero si no las puedes convertir, tal vez no son tan relevantes como pensabas. Puedes seleccionar tráfico relevante que se convierte, pero si el tráfico no está allí, las conversiones serán escasas. Si seleccionas palabras clave de alto volumen, que en ocasiones convertirán, pero sin relevancia, los tipos de conversión serán bajos y tu esfuerzo será alto. ¡No es una buena mezcla para la productividad!
En última instancia, sólo debes seleccionar las palabras que ofrecen rendimiento en los tres niveles. Si no es así, puedes estar perdiendo tu tiempo. Las mejores palabras clave son las que has determinado que son relevantes y que han sido puestas a prueba para obtener resultados. Nada más importa.